DIRECTIVOS QUE NO SIENTEN…, ¡RESULTADOS QUE SE RESIENTEN!
¿Por qué nos arriesgamos y esforzamos más para evitar una pérdida que para conseguir una ganancia? Porque fisiológicamente nuestro cerebro está evolutivamente adaptado para «sobrevivir», no para «vivir». El «objetivo» de cualquier ser vivo (incluido nosotros) es transmitir sus genes a la siguiente generación, para perpetuar la especie, y punto. Por ello tenemos mucho más estructuradas y desarrolladas las emociones desagradables …